La Red China de EE. UU. informó que el viernes la Casa Blanca puso fin oficialmente a la exención arancelaria mínima para las importaciones chinas con un valor inferior a 800 dólares, lo que marca un paso crucial para la administración Trump en materia de política comercial. Este ajuste restituye la orden ejecutiva firmada por el presidente Trump en febrero de este año. En aquel momento, se pospuso debido a la falta de los procedimientos de control correspondientes, lo que provocó una situación caótica donde millones de paquetes se amontonaron en la zona de carga del aeropuerto.
Según las últimas directrices emitidas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), los paquetes enviados desde China continental y Hong Kong, China, estarán sujetos de manera uniforme a un arancel punitivo del 145%, además de los aranceles vigentes. Algunos productos, como los teléfonos inteligentes, son la excepción. Estos productos serán gestionados principalmente por empresas de mensajería exprés como FedEx, UPS o DHL, que cuentan con sus propias instalaciones de gestión de carga.
Las mercancías enviadas desde China por correo postal, con un valor inferior a 800 dólares estadounidenses, se gestionarán de forma diferente. Actualmente, se debe pagar un arancel del 120 % del valor del paquete o una tarifa fija de 100 dólares estadounidenses por paquete. Para junio, esta tarifa fija aumentará a 200 dólares estadounidenses.
Un portavoz de la CBP afirmó que, si bien la agencia enfrenta una tarea difícil, está lista para implementar la orden ejecutiva presidencial. Las nuevas medidas no afectarán el tiempo de despacho de aduanas para los pasajeros comunes, ya que los paquetes correspondientes se procesan por separado en el área de carga del aeropuerto.
Este cambio de política supone un desafío significativo para las plataformas de comercio electrónico transfronterizo, especialmente para minoristas en línea chinos como Shein y Temu, que se centran en estrategias de precios bajos. Anteriormente, dependían en gran medida de exenciones de "límite mínimo" para evitar impuestos, y ahora se enfrentarán a una alta presión arancelaria por primera vez. Según un análisis, si toda la carga fiscal se traslada a los consumidores, el precio de una camiseta, cuyo precio original era de 10 dólares, podría subir a 22 dólares, y el de un juego de maletas, cuyo precio original era de 200 dólares, a 300 dólares. Un caso presentado por Bloomberg muestra que el precio de un paño de cocina en Shein se disparó de 1,28 dólares a 6,10 dólares, un aumento de hasta el 377 %.
Se informa que, en respuesta a la nueva política, Temu completó la actualización de su plataforma en los últimos días y la interfaz de visualización de productos se ha cambiado por completo al modo de visualización prioritaria de los almacenes locales. Actualmente, todos los productos de correo directo procedentes de China están marcados como "temporalmente agotados".
Un portavoz de Temu confirmó a CNBC que, como parte de los esfuerzos de la compañía por mejorar los niveles de servicio, todas sus ventas en Estados Unidos ahora son manejadas por vendedores locales y completadas "a nivel nacional".
El portavoz afirmó: «Temu ha estado reclutando activamente a vendedores estadounidenses para que se unan a la plataforma. Esta iniciativa busca ayudar a los comerciantes locales a atraer más clientes y desarrollar sus negocios».
Aunque el aumento de aranceles podría no reflejarse inmediatamente en los datos oficiales de inflación, los economistas advierten que los hogares estadounidenses sentirán el impacto directamente. El economista de UBS, Paul Donovan, señaló: «Los aranceles son en realidad una especie de impuesto al consumo, que recae sobre los consumidores estadounidenses, no sobre los exportadores».
Este cambio también plantea desafíos para la cadena de suministro global. Kate Muth, directora ejecutiva del Grupo Asesor Postal Internacional (IMAG), declaró: «Aún no estamos completamente preparados para afrontar estos cambios, especialmente en aspectos como la determinación del origen en China, donde aún quedan muchos detalles por aclarar». A los proveedores de logística les preocupa que, debido a las limitadas capacidades de control, se produzcan cuellos de botella. Algunos analistas predicen que el volumen de minipaquetes enviados desde Asia a Estados Unidos se reducirá hasta en un 75 %.
Según datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos, en los primeros meses de 2024, el valor total de los bienes de bajo valor importados de China alcanzó los 5.100 millones de dólares estadounidenses, lo que la convierte en la séptima categoría más grande de bienes importados por Estados Unidos desde China, solo superada por las consolas de videojuegos y ligeramente por encima de los monitores de computadora.
Cabe destacar que la CBP también ha ajustado una política que permite que las mercancías procedentes de China continental y Hong Kong con un valor no superior a 800 dólares estadounidenses, así como las mercancías procedentes de otras regiones con un valor no superior a 2500 dólares estadounidenses, se sometan a procedimientos informales de declaración aduanera sin necesidad de proporcionar códigos arancelarios ni descripciones detalladas de las mercancías. Esta medida, que busca aliviar las dificultades operativas de las empresas de transporte de mercancías, también ha generado controversia. Lori Wallach, directora de Rethink Trade, una organización que aboga por la cancelación de las políticas de exención, declaró: «Sin procesamiento electrónico ni códigos HTS para las mercancías, el sistema aduanero tendrá dificultades para examinar y priorizar eficazmente las mercancías de alto riesgo».
Hora de publicación: 15 de mayo de 2025
